Posts in Category: Derechos Humanos

Técnico de Claro lleva 10 días desaparecido en Cuturú, Antioquia

Nelson Restrepo Ubaque, de 34 años se encuentra desaparecido desde el pasado 17 de septiembre en Cuturú, corregimiento de Caucasia, Antioquia.

Restrepo, quien se desempeña como técnico de mantenimiento de redes y telecomunicaciones de Claro, llegó a esta población con equipo portatil para hacer un trabajo en una torre. Sin embargo, según versiones de testigos se le vio por última vez hacia el medio día de esa fecha, con otra persona en una moto.

El hombre vestía pantalones cortos y una camiseta negra. Sus familiares ya reportaron el caso al CTI y las autoridades de Caucasia están trabajando para encontrar al bogotano.

Cualquier información comunicarse con la Dijin o le Gaula de Caucasia.

El hombre vestía pantalones cortos y una camiseta negra. Sus familiares ya reportaron el caso al CTI y las autoridades de Caucasia están trabajando para encontrar al bogotano.

Fuente: http://bit.ly/1GuHNxz

Procuraduría General de la Nación formuló cargos al actual comisario de Familia de Caucasia por presunto incumplimiento de sus deberes

 

Al parecer, el investigado no prestó la atención requerida en casos que involucraban a varios menores de edad, alegando que estos eran de competencia del Instituto Colombiano de Bienestar de Familiar (ICBF). 

Por el presunto incumplimiento de sus deberes la Procuraduría General de la Nación formuló pliego de cargos contra el señor Hernán David Jaraba Yances, en su condición de actual comisario de Familia de Caucasia (Antioquia).

De acuerdo con el auto proferido por la Procuraduría Provincial de Yarumal, al sujeto disciplinable se le endilgan dos cargos: el primero de ellos por no prestar la atención requerida en casos que involucraban a varios menores de edad, alegando que estos eran de competencia del Instituto Colombiano de Bienestar de Familiar (ICBF), Centro Zonal Bajo Cauca.

Consideró el órgano de control que el funcionario debió atender y remitir estas situaciones a la autoridad correspondiente, y en caso de que ameritaran medidas provisionales, de emergencia, protección o restablecimiento de derechos, adoptarlas de inmediato y trasladar el expediente al competente, a más tardar el día hábil siguiente.

Así mismo señaló que dentro de las funciones del comisario de Familia están las de prevenir, garantizar, restablecer y reparar los derechos de los niños, niñas y adolescentes, en las circunstancias de maltrato infantil, amenaza o vulneración de derechos. 

Esta supuesta conducta cometida por el investigado fue calificada por la Procuraduría como grave cometida con dolo, por no aplicar los principios de corresponsabilidad e interés general para solucionar los casos que le fueron informados por la Policía de Infancia y Adolescencia en el 2013.

En el segundo cargo se le cuestiona al actual funcionario por no encontrarse disponible ni informar acerca de su ausencia a la administración municipal de Caucasia, incumpliendo lo consagrado por el artículo 87 de la Ley 1098 de 2006 que establece que el horario de la Comisaría de Familia debe ser permanente y continuo a fin de asegurar a los niños, las niñas y los adolescentes la protección y restablecimiento de sus derechos. 

Provisionalmente, esta falta del señor Jaraba Yances fue calificada como leve cometida con culpa grave, dado que con su actitud omisiva habría desconocido una serie de postulados legales de imperativo acatamiento para los servidores públicos. 

Finalmente la Procuraduría Provincial de Yarumal compulsará copias a la Oficina de Control Interno Disciplinario del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar con el objeto de que se investigue el comportamiento presuntamente constitutivo de falta disciplinaria en el que pudiera estar incursa la señora Viviana Judith Rodríguez Ramírez, en su condición de defensora de Familia del Centro Zonal nro. 7 Bajo Cauca, de acuerdo con lo expuesto por el comisario de Familia de Caucasia a través de los escritos en los cuales explica los hechos motivo de esta investigación. 

Fuente: http://bit.ly/1GuILKi

 

Capturan a integrantes del Clan Úsuga por el asesinato de Luis Carlos Cervantes

Las autoridades capturaron a ocho personas por ser los presuntos responsables de la muerte del periodista.

La Policía adelantó un operativo donde logró la captura de varios integrantes del Clan Úsuga, quienes serían los responsables de perpetrar el asesinato del periodista Luis Carlos Cervantes, en el municipio de Tarazá (Antioquia). 

Por su parte, el comandante de la Policía de Antioquia, coronel Ramiro Riveros, informó que entre los hombres capturados se encuentra alias ‘Morroco’, señalado de dar la orden para asesinar al comunicador, el 12 de agosto de 2014. 

Asimismo, la Policía indicó que entre los detenidos están alias ‘Gomelo’, de 43 años; alias ‘Mi Niño’, de 38 años; alias ‘El paisa o 4.3’, de 33 años; alias ‘Eduar’, de 34 años; alias ‘Aleison’, de 39 años, y alias ‘Coco’, de 40 años.

 

 

Los integrantes del Clan Úsuga, a quienes les dictaron medida de aseguramiento en un centro carcelario, deberán responder por los delitos de concierto para delinquir y homicidio agravado.

Cabe recordar que al periodista Luis Carlos Cervantes le propinaron tres disparos que acabaron con su vida mientras esperaba a su hijo en el colegio, el pasado 12 de agosto de 2014. 

Asimismo, a Cervantes le habían retirado tres semanas antes las medidas de seguridad que tenía asignadas por parte de la Unidad Nacional de Protección, gracias a que una evaluación de riesgo determinó que ya no corría peligro. Sin embargo, las amenazas contra su vida seguían.

Gobernación ya no terminara el hospital de Caucasia

El hospital lleva una ejecución del 70 por ciento y servirá a 500 mil pobladores del Bajo Cauca y el sur de la Costa.

 

 

El hospital regional de Caucasia, que registra un avance de obra del 70%, estaría terminado para mediados de 2016 y no para este diciembre como estaba previsto, confirmó la secretaria de Salud de Antioquia, Luz María Agudelo Suárez, que ayer estaba en los trámites de terminación del contrato entre la ESE y la Gobernación como constructor, a través de la Secretaría de Infraestructura.

Lo anterior a raíz de que $25.000 millones que estaban pendientes por asignar desde el Ministerio de Salud le fueron girados directamente al hospital, lo que significa que será la propia ESE César Uribe Piedrahíta la que abocará las obras por ejecutar, que son básicamente de dotación e instalación de elementos anexos a la estructura, como redes de energía, aire y acabados.

“A partir de la entrega de los dineros a la ESE, nosotros debemos liquidar automáticamente el contrato, porque ese es un ente jurídico distinto que debe iniciar un proceso de contratación de acuerdo a sus principios”, explicó.

Añadió que el cambio de constructor causa traumatismo, pues con la Gobernación se venía a un ritmo que se altera al iniciar nuevos procesos de adjudicación y contratación, aunque afirmó que el ente departamental, por el hospital ser público, seguirá ejerciendo supervisión, asesoría y seguimiento.Reactivó la obra

Hay que decir que la Gobernación, en el periodo actual, fue la que reactivó el proyecto. Entre 2010-2011, en esta obra se invirtieron $14.165 millones en la construcción de la primera etapa, que era básicamente la obra negra, pero el hospital quedó parado por el faltante de $25.000 millones.

Entre 2012 y 2015, la actual Administración abocó las etapas siguientes con una inversión de $26.950 millones. Hizo estudios de factibilidad, calibración de diseños y contrato e interventoría.

El secretario de Salud local, José García Niebles, lamentó que no sea la Gobernación la que termine la construcción, pues el hospital es prestador de servicios pero no tiene experiencia en contratación.

“La Gobernación venía haciendo un excelente trabajo; para garantizar la transparencia conformaremos una veeduría ciudadana para vigilar que se inviertan bien los recursos”, precisó y expresó su preocupación por el retraso.

El gobernador Sergio Fajardo, al saber que el dinero le había sido girado directamente al hospital, dijo que “la plata está, digámoslo entre comillas, en el lugar equivocado”.

ANTECEDENTES OBRAS CONCRETAS DE GOBERNACIÓN

En la pasada administración departamental (año 2009), se compraron los predios y se contrató con la Universidad Nacional los estudios y diseños del hospital, que dieron como resultado un diseño para un centro de tercer nivel. En ese momento no se hizo ningún estudio de red para evaluar la factibilidad técnica y financiera de un proyecto de este tipo. Las inversiones de la Gobernación actual se hicieron en obras como revoque de estructuras, instalación de redes de aire acondicionado y contra incendio, además de la recuperación y acabado de la estructura, instalación de tejas y la subestructura debajo de la cubierta.

 
 

Antioquia: por trashumancia de votos la MOE emitió alerta en 14 municipios

En más del cien por ciento, respecto a los comicios regionales del 2011, se incrementaron las inscripciones de cédulas en 14 municipios de Antioquia durante lo que va corrido del 2015.
 
Uno de los municipios con mayor riesgo electoral es Santa Rosa de Osos, norte de Antioquia, en donde van 2 mil 712 inscritos para las elecciones de octubre, 960 más que en los comicios anteriores.
 
El Coordinador Regional MOE, Carlos Valencia, indicó que se han recibido 189 denuncias ciudadanas por posibles delitos electorales en Antioquia.
 
Carolina del Príncipe, Liborina, Argelia, Caucasia, Alejandría, Anorí, Armenia, Mantequilla, Caldas, La Pintada, Amalfi, Cisneros, Betulia y El Bagre son los otros con mayor riesgo electoral en Antioquia.
 
 
También en La Estrella, Olaya y Vegachí, la Fiscalía adelanta investigaciones de tipo penal por posibles irregularidades en el proceso electoral. 

Campaña en Cáceres contra reclutamiento de Niños

Los ochenta niños y niñas de Cáceres se vistieron de cortos, lucieron uniformes nuevos de las mejores selecciones de fútbol y corrieron, gambetearon y anotaron muchos goles. No todos se llevaron las medallas del torneo, pero aprendieron valores y comportamientos para driblar el reclutamiento de los grupos armados ilegales.

Durante una semana (del 11 al 16 de mayo) los menores participaron del torneo Juega por la Vida, la campaña del Ministerio de Defensa contra ese delito que en estos días se concentró en el Bajo Cauca antioqueño, una de las regiones afectadas por el reclutamiento de menores de edad por las guerrillas y bandas criminales.
Los uniformes y colores de las selecciones representaban cualidades como tolerancia, respeto, disciplina, amistad solidaridad y responsabilidad.

El objetivo no solo era mostrar el talento para el fútbol, sino poner en práctica, en la cancha, los valores enseñados durante los partidos para respetar las reglas de juego, a los compañeros, rivales y la autoridad representada en los árbitros.

Así lo entendió bien Laura*, una niña de 11 años que fue la goleadora en la categoría femenina. La menor vive con su madre y hermanos en zona rural de Cáceres. Su padre está en prisión por múltiples delitos.

Ella contó durante los partidos que, “me gusta jugar al fútbol porque me divierto con los amigos y aprendemos a no pelear ni decirles groserías a los árbitros y hacerles caso a los técnicos”.

En la zona donde vive Laura y los demás niños y adolescentes tienen presencia las Farc y las bandas criminales, que con engaños e intimidaciones reclutan a los menores para sus filas subversivas, o en el caso de las bandas, para cobrar extorsiones, robar, instalar minas antipersonal y transportar armas y estupefacientes. También son víctimas de abusos sexuales.

Además del torneo, “las jornadas de prevención del reclutamiento ilegal de menores convocaron a cerca de tres mil personas de Cáceres y municipios vecinos”, indicó el coronel Ulises Figueredo, comandante de la Décima Primera Brigada, adscrita a la Séptima División del Ejército.

Juega por la Vida se desarrolló la semana pasada en 8 municipios del país y hace parte de la estrategia ‘Basta aquí soy libre’, que ha llegado en tres años a 187 municipios con alto riesgo de reclutamiento ilegal de menores.

El objetivo es llevar una oferta institucional de salud y educación, aprovechamiento del tiempo libre a regiones donde el conflicto ha impedido al Estado proteger a la población civil.

Fuente: http://bit.ly/1cMN6zX

Crónica: La travesía de la coca en Crucito, dentro del Nudo de Paramillo, un viaje al corazón de la guerra

Tierralta. Las balas no se escucharon, se confundieron con el estrépito del helicóptero que se hizo visible tras un cerro. De repente, los campesinos comenzaron a esconderse entre matorrales. A 15 metros, en medio de la confusión, Euclides Castillo vio cómo un balazo le astilló una de las piernas a su primo. Sintió miedo, impotencia. ¿Vendrían a matarlos? ¿La policía antinarcóticos los confundía con guerrilleros? Había que admitirlo: sembraban matas de coca en casi dos hectáreas cuyos dueños habían abandonado para buscar suerte al casco urbano de Tierralta. Entonces escuchó otro grito desesperado detrás suyo: "Nos están matando". Y más allá, vio cómo un grupo de militares comenzaba a cercarlos.

Los uniformados, al notar que unos campesinos comenzaron a salir con las manos en alto y otros auxiliaban a los heridos, bajaron sus fusiles. El pánico de los labriegos se convirtió en rabia, en reclamos. Cuatro de los suyos estaban heridos en piernas y brazos: no eran guerrilleros, sino padres de familia que intentaban sobrevivir sin más chance que ganar unos pesos de la ilegalidad; la policía lo sabía muy bien. Los uniformados, por su parte, aseguraron que no habían disparado. Hubo gritos, insultos. Lo cierto es que desde hacía una semana atrás los cultivadores de esta zona se oponían a que la policía erradicara de forma manual la coca, como lo había estado ejecutando en las partes accesibles del Nudo de Paramillo, evadiendo minas y tropas subversivas. Este hecho ocurrió el pasado 9 de agosto.

-Lo que más nos molesta es que casi siempre se equivocan al fumigar cultivos con aspersión. A mi me han dañado cinco cultivos de maíz –afirma Euclides.

Finalmente, los cuatro heridos fueron trasladados a hospitales de Tierralta y la capital Montería, desde la vereda Mata de Guineo del corregimiento de Crucito, en el mismo helicóptero que generó el pánico. Días después, el comandante de la Policía en Córdoba, coronel Carlos Vargas Rodríguez, manifestó que de ser cierto los disparos desde la aeronave, las balas que habrían herido a los hombres fueran punto 50, tan grandes como para destrozar un brazo. La policía barajó la posibilidad de que guerrilleros que vigilaban a los campesinos, al advertir la fuerza pública, dispararon para generar caos y confusión y así poder escapar.

Lo cierto, afirma Euclides, es que esta escena se ha repetido por años en cada uno de los 19 corregimientos de Tierralta. Según líderes de desplazados de la zona, por ejemplo, al menos el 80% de los campesinos de Crucito subsiste de los cultivos ilícitos. Afirman que no hay más alternativa, desde que el embalse de la hidroeléctrica Urrá inundó 8 mil hectáreas a finales de los años 90, quedaron incomunicados, atrapados: el agua se tragó la carretera que en 45 minutos los unía a Tierralta, donde comercializaban sus siembras de maíz, plátano, yuca, ñame y verduras. Ahora deben tomar un bus, una lancha y finalmente otro bus para llegar al municipio; ahora están a dos horas de camino.

Crucito, que hasta principios de los años 90 fuera un poblado próspero y envidiado, poco a poco se queda solo. Está en las estribaciones del Nudo de Paramillo, una cadena montañosa conformada por tres serranías que une al sur de Córdoba con el noroccidente de Antioquia, y cuyo dominio en gran parte lo ejerce el Bloque Iván Ríos de las Farc y las bandas criminales (bacrim): los que compran la coca.

Para los ilegales lo importante es que el Nudo de Paramillo se convirtió en una de las despensas de cultivos ilícitos más grande del país. La ventaja para ellos es que estas serranías, desde los años 90, son también un corredor estratégico para que hoy las Farc y las bacrim lleven la droga procesada hasta los puertos del Urabá antioqueño, por las ardientes tierras del Bajo Cauca. Su destino: centro América y Estados Unidos, afirman fuentes militares.

La travesía de la coca

Dos semanas antes del enfrentamiento entre campesinos y erradicadores, Euclides, padre de siete hijos, se levantó a las 4:00 de la madrugada y ensillo su burro Pepe. Trabajaría en algo que le daba miedo: recoger hojas de coca en lo profundo del Nudo para luego venderlas a la vera de un camino. Su mujer le empacó comida y le echó la bendición. A Euclides siempre lo atacaba un mal presagio cuando se aventuraba, a pesar de que había realizado casi 40 viajes en los últimos 4 años. Tenía dos cerdos, una vaca, 17 gallinas, dos burros y una pequeña huerta: insuficiente para sostener una familia tan numerosa. Él vivía en la vereda Colón Alto, en una parcela de hectárea y media, a un par kilómetros de donde, dos semanas después, miraría caer a su primo de un balazo. En los últimos 20 años se han llevado a cabo en Crucito más de 10 masacres.

Una de las más cruentas fue en 1999, cuando seis campesinos fueron asesinados en diferentes veredas de Crucito por parte de las extintas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), comandadas en esa región por Salvatore Mancuso, hoy purgando condena en Estados Unidos. Eran acusados de colaborar con las Farc, en una época en que las AUC buscaban ganarle terreno a la guerrilla en el Nudo, sin mucho éxito. Euclides tenía 15 años cuando ocurrió. Fue la primera vez que vio un muerto con disparos en la cabeza. "Desde entonces siento el corazón más duro", confiesa.

Para recoger la coca, Euclides tuvo tres horas de camino bajo un calor y una humedad que le empapó pronto el cuerpo de sudor. Primero remontó leves cordilleras y luego se internó por una selva espesa, ruidosa de insectos y de aves por donde el sol entraban rebotando entre los ramajes. Saludó a un par de indígenas Emberá Katío que cazaban. Recuerda, también, que sintió miedo de que algún escuadrón del ejército, o guerrilleros o miembros de bacrim, lo confundiera con un enemigo y lo mataran. Había un enemigo más, las minas antipersonas sembradas por el Frente 58 de las Farc. Según cifras oficiales, entre el 2000 y el 2013, 498 personas fueron víctimas de ellas en el Nudo, es decir, como si por cada año 38 personas pisaran una.

-El Nudo es de todos y de nadie-, dice Euclides con la mirada grave.

Era un riesgo al que no logró acostumbrarse. Así que comenzó a cantar vallenatos de Diomedes Díaz, no tan alto, pero si lo suficiente para ser escuchado. La idea: dar a entender que él no representaba ningún peligro. Luego salió a un claro y comenzó a ver, allí y allá, arbustos de coca que crecían espontáneamente, en apariencia abandonados pero que tienen como fin que los campesinos tomen la coca y no tengan otra opción que canjearla con la guerrilla: es una estrategia que la subversión fraguó, ante la presencia esporádica del Ejército y el desconcierto entre bandas al margen de la ley.

Antes de que el Ejército conformara en el 2008 la Fuerza de Tarea Conjunta para recuperar el Nudo y comenzar con las erradicaciones, aún se podían hallar extensos cultivos de coca allí; cuatro, cinco, seis hectáreas sembradas una al lado de la otra, custodiadas por minas y guerrilleros, y al cuidado de campesinos. A finales de los noventa había coca al pie del embalse y alrededor del casco urbano de Crucito. Hoy hay más, pero diseminada en pequeñas siembras a todo lo ancho y largo del Nudo de Paramillo, incluso dentro de resguardos indígenas, víctimas también de esta guerra. En términos generales, según datos del Sistema Integrado de Cultivos Ilícitos (Simci) entre 2001 y 2012 los cultivos de coca en el Nudo de Paramillo aumentaron en 295% al pasar de 805 hectáreas en el primer año a 3182 hectáreas en el último.

Los campesinos, que comenzaron a notar la coca desde mediados de los años 90, no tuvieron más alternativa que sembrar, al verse cercados por el agua de Urrá, embalse alimentado por el descomunal ríos Sinú, que a su vez nace gracias al río Esmeralda y al río Verde, que surgen en las entrañas del Paramillo. Era raspar coca o vivir en la indigencia.

-Comencé a raspar coca y a echarla en un costal –continúa Euclides con su relato-. Lo cierto es que uno ve maticas a media hora de camino en el mismo Crucito, pero es solo hasta dos horas más andando que uno puede raspar con tranquilidad.

En aquella ocasión, en hora y media, alcanzó a recoger cuatro arrobas de hoja de coca. Después caminó media hora más por el filo de una ladera. Dejó beber a su burro el agua de un arroyo, y luego salió hasta el camino de piedras y polvo anegado que corre hasta la vereda Santa Isabel del Manso, cuya población vive intimidada. Allí, en enero de 2013, ocurrió una supuesta masacre de seis personas por parte de, según información militar, Los Urabeños (grupo que las autoridades pasarían a llamar ‘Clan Úsuga’). Días después, miembros militares afirmaron que no hubo masacre, en contra de lo que dijeron habitantes del Manso.

Cierta la matanza o no, en aquella ocasión, el presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) del Manso, Clímaco Pitalúa, fue sacado a la fuerza de su casa ante las súplicas de sus vecinos, llevado hasta el monte, golpeado en la espalda. Le fracturaron uno de sus brazos con el fin de que suministrara información sobre unos hombres. Así lo relató cuando llegó moribundo al casco urbano de Tierralta. Logró, en medio de la selva, escaparse de sus captores; escuchó disparos. Siguió para él una travesía entre la vorágine del Nudo. Tres días después, en Tierralta, Clímaco se enteró que con él llegaron al tiempo 14 familias desplazadas del Manso. Ellas confirmaron que desde hacía una semana hombres armados intimidaban a la población tras un año de tensa paz.

El Paramillo sin dueño

Euclides, a la vera del camino accidentado, esperó, sin ver a nadie, una hora. "Me están vigilando", pensó. Luego dos hombres jóvenes en una moto se detuvieron frente a él. No se cruzaron palabras. Recibieron el costal y le dieron a Euclides cinco billetes de 20 mil pesos. Atardecía cuando regresó a casa. Sus hijos jugaban en el patio.

-Aquí casi todos salimos a recoger coca de forma individual –afirma Euclides-. Y los que no, la siembra en grupos en las colinas más apartadas, y hasta levantan laboratorios con químicos suministrados por personas.

Con la plata que recibió Euclides pudo comprar, en parte, lo que no produce la tierra: panela, aceite, café, pan, azúcar, sal, jabón, crema dental, ropa, sábanas, cuadernos para sus hijos, tela, velas, fósforos, alambre, tejas de zinc, herramientas, clavos... Ahorró también para cuando alguien de su familia necesite ir de urgencias a Tierralta, ya que a Crucito llega solo un médico los martes. En este poblado, como en todos los incomunicados por el embalse, nadie compra cultivos. Lo que sí ocurre son trueques, en el casco de Crucito, que no tiene más de 80 casas, dos iglesias cristianas y una católica, cinco tiendas, dos restaurantes, una droguería, un bus, una cancha de microfútbol, y una escuela que solo da hasta octavo grado y que le brinda estudio a 150 niños, afirma Over Tesillo Castro, presidente de su JAC.

-Nosotros no le importamos ni al alcalde ni al gobernador –comenta Tesillo-. Con decirles que Crucito no tiene electricidad, y eso que estamos al pie de una de las hidroeléctricas más grandes del país. Hay una planta de energía a gasolina, que trabaja por ratos.

Tierra fértil y gente pobre

Rosa Epifanía, mujer de 54 años y viuda desde hace 18, es bien conocida en Crucito porque ha servido de partera y porque sabe de medicina natural. Ella afirma que ningún cultivo en esta parte de Tierralta es rentable porque el solo transporte del producto hasta Tierralta representa un gasto enorme. Afirma que si, por ejemplo, un campesino logra acumular una tonelada de maíz en cinco meses, esta se la comprarán en 250 mil pesos, y parte del dinero se quedará en el transporte: hay que tomar un bus, luego un bote hasta Puerto Frasquillo, un caserío militarizado, y luego otro bus hasta el mercado: dos horas de camino. Luego tomar el mismo transporte de regreso antes de las 3:30 de la tarde, cuando sale la última lancha hacia Crucito. La medida la tomó Ejército, que decomisa a los campesinos y a los Emberá Katío, en el puerto, cualquier tipo de insumo para cultivos. En transporte, si el labriego lleva consigo un bulto de maíz, le genera en promedio un gasto de 42 mil pesos.

-Además, ¿Quién trabaja medio año por tan poca plata? Lo mismo pasa con la yuca, el ñame y el plátano, se abarataron demasiado –afirma Rosa.

Y es que, según se cuenta, en el negocio de la coca todos ganaban y ganan. Antes del 2005, año en que comenzaba a terminar la desmovilización de las AUC, una hectárea coca podía, cada dos meses y medio, llegar a dar 300 arrobas de hoja de coca, capacitadas para dar 16 libras de mercancía (unos 8 kilos). Los campesinos recibían por ello, en promedio, 17 millones 600 mil pesos. "Te gastabas tu 4 millones de pesos en el proceso y el resto quedaba para ti", reveló una fuente desplazada de Crucito desde hace cinco años. Y añade que "a principios del 2000, la coca la venían incluso a recoger en helicóptero. Hoy en día por 16 libras ya no pagan ni la mitad de lo de antes".

Según Álvaro Álvarez, coordinado de la Mesa de Víctimas de Tierralta, hoy vivir en Crucito es casi imposible: hay tierra fértil pero no hay cómo sacar los productos, así que pocos siembran, y está la subversión que continuamente se enfrenta con el Ejército. Según las cuentas de Álvarez, quien ha sobrevivido a tres atentados, desde el año 2000 se han desplazado más de 510 familias desde Crucito y que no han vuelto a sus parcelas.

Y la situación sigue siendo grave. Según el Registro Único de Víctimas (RUV), Tierralta tuvo entre el 2012 y el 2013 un total de 2 mil 298 personas desplazadas provenientes de los corregimientos que se encuentran en el Nudo de Paramillo.

El párroco de la iglesia San José de Tierralta, Jorge Miranda Pérez, ha sido desde hace más de cinco años uno de los testigos más próximos de la problemática social que enfrentan las poblaciones aisladas por el dique, "en medio de un conflicto en que ningún enemigo es totalmente reconocible", afirma. Y añade: "He visto a los campesinos más pobres rodeados de las tierras más fértiles de Colombia". Cada par de días, Jorge viaja a diferentes veredas dentro del Nudo, escucha a la gente, ofrece misas. Ha enterrado a más de 200 asesinados.

-En esta problemática hay que echarle la culpa a todos por igual: al Gobierno por el abandono de años, a las bacrim, a las Farc y al narcotráfico, por las matanzas y por sembrar el terror en los rostros de la gente –afirma, y añade-: Vea como son las cosas, estamos rodeados de coca y no conozco a nadie adicto a ella en Tierralta.

La población Emberá Katío, conformada hoy por 33 resguardos en todo el Nudo de Paramillo (también llamado Alto Sinú), ha hecho parte también de esta disputa por el poder. Ellos llevan habitando estas tierras hace más de un siglo. Todos se opusieron a la construcción del embalse e incluso, a finales de 1994, llevaron a cabo un acto simbólico extraordinario para despedirse de los 365 kilómetros del río Sinú, de su belleza y riqueza llena de peces: navegaron por seis días en 72 embarcaciones adornadas con flores y vivos follajes. No dejaron de cantar, en un ritual en el que los caciques invocaron los dioses de la fertilidad y la abundancia, y recordaron las historias de sus orígenes.

 

La travesía comenzó en los nacimientos de los ríos Verde y Esmeralda, en el Alto Sinú (donde el embalse de Urrá años después estancó sus aguas), y finalizó en Boca de Tinajones, donde las espesas aguas de cobre del río Sinú se funden con las azules del mar Caribe, en el municipio de San Bernardo del Viento. Los Emberá Katío sabían que no volverían a navegar por sus aguas pues el dique cortaría el recorrido. El 31 de diciembre de 1994, las autoridades prohibieron la navegación.

Desde entonces los líderes de esta comunidad fueron exterminados paulatinamente. A finales de los 90 las AUC intentaron conquistar el Nudo combatiendo con las Farc. Pedro Domicó Domicó, líder indígena en el Alto Sinú, recuerda esa época cuando él era apenas un muchacho. "Con la llegada de Urrá nos quedamos sin peces, que pescábamos en los diferentes ríos, hoy el embalse se los llevó todos", afirma, y añade: "Lo peor es que todos nuestros resguardos están rodeados de minas".

En ocho meses, entre los años 2000 y 2001, fueron asesinados a bala y por las Farc, casi siempre delante de sus familias, los líderes indígenas Lucindo Domicó, Alonso Jarupia, Rafael Domicó, Alejandro Domicó, Santiago Domicó, José Manuel Domicó, Maximiliano Domicó, Jackelino Jarupia Bailarín y Maisito Domicó, entre otros, según registraron los medios.

Las promesas

En una visita del gobernador de Córdoba, Alejandro Lyons Muskus, a Crucito en octubre de 2013, junto con una comitiva humanitaria, afirmó que, en efecto, la empresa Urrá está obligada por ley a construir una nueva carretera para unir a esta población con Tierralta, y así beneficiar a más de 700 familias campesinas que viven en diferentes veredas en el Nudo de Paramillo. En aquella ocasión, Lyons entregó obras en Crucito por 600 millones de pesos, entre ellas mejoras al centro de salud y a la escuela.

En efecto, en agosto de este años, en Instituto Geográfico Agustín Codazzi (Igac), por solicitud de las directivas de la hidroeléctrica Urrá, comenzó a realizar los avalúos de 76 predios con miras a habilitar una vía para Crucito, que comprenden una extensión de 81 hectáreas. Este proceso podría demorar hasta finales de este año.

La realidad de Crucito es la de cientos de poblados del sur de Córdoba y el Bajo Cauca antioqueño. Euclides Castillo, por su parte, se ha trasladado a Montería a hacer otra vida y, en efecto, las dos hectáreas de coca que sembraban aquella tarde del helicóptero, quedaron abandonadas un par de semanas hasta que los campesinos volvieron. Esta guerra parece de nunca acabar.

Algunas estadísticas:

Por: Pompilio Peña M. @pompiliooo

Fuente: http://bit.ly/1FICknZ

LOS NIÑOS ASESINADOS: !FUERON LAS FARC!

Jairo Vanegas y Victoria Grimaldo, padres de los niños asesinados

 

Cuando el camarada Santos ordenó al Director de la Policía Nacional que en menos de 3 días debería capturar a los asesinos que perpetraron la horrible masacre en el departamento de Caquetá, muchos colombianos pensaron que ahí había gato encerrado. Y tenían razón.

El show mediático de Santos, repartiendo órdenes a diestra y siniestra, seguro de que habría capturas, nos llevó a desconfiar de quien siendo ministro de Defensa se inventó el cuento macabro de que las Fuerzas Militares tenían como propósito institucional el asesinar civiles para hacerlos pasar como terroristas.

El espectáculo de las capturas estuvo dividido en varios capítulos. Primero decían que se habían pagado 500 mil pesos y que eran tres asesinos; poco a poco fueron subiendo el número de sicarios y de dinero, y hasta hace unas horas ya iban acomodados a las malas 11 asesinos y un millón de pesos en ese crimen.

Le echaron el cuentico a la opinión pública de que la causa había sido por tierras, pero se les olvidó un pequeño detalle: la madre de los niños asesinados, Victoria Grimaldo, es desmovilizada de las FARC, y todos saben que un desmovilizado no puede regresar al territorio donde delinquen los terroristas de las FARC, porque la venganza de los bandidos es terrible.

Y resulta que esas tierras del Caquetá, donde está la vereda El Cóndor (sitio del asesinato) es área de influencia del terrorista Joaquín Gómez quien, a pesar de los anuncios del gobierno y de las FARC acerca de su intención de no reclutar más menores de edad, lo estaba haciendo en la región.

Según nuestras muy confiables fuentes, Joaquín Gómez le exigió a su antigua correligionaria en el crimen, que les entregara al joven de 17 años y a la niña de 14 años como cuota de apoyo a la revolución.

Y como la desmovilizada se negó, aseguran nuestras fuentes, Joaquín Gómez ordenó asesinar a los niños de 4, 10, 14 y 17 años de edad, con la instrucción precisa de violar salvajemente a la niña para que la “traidora” a la causa escarmentara y aprendiera que con las FARC no se juega. Y estos “capturados”, si todo marcha según lo planeado por esa mafia, no pagarán más de 3 años de cárcel. O eso, o los matan sus contratantes.

El camarada Santos debe conocer muy bien esta verdad, igual que el ministro Pinzón, el Fiscal General Eduardo Montealegre, Sergio Jaramillo y Humberto de La Calle. Pero como necesitan seguir con el tétrico sainete, se inventaron lo que se inventaron.

Acá uno no sabe quién es más desalmado: el que ordenó la masacre, los que la perpetraron, o la joya que tenemos de presidente quien, junto a sus coequiperos en la perversidad, desprecian la vida de inocentes criaturas que parecieran haber nacido con el único propósito de satisfacer la obscena y lujuriosa pasión de Juan Manuel Santos por ofrecer niños en sacrificio abominable para saciar la sed de sangre de sus amigos, los terroristas.

Fuente: http://bit.ly/1zzM6Uw

Las Farc incineran cinco tractomulas en el Putumayo

En las últimas horas, las autoridades confirmaron un nuevo ataque de las Farc en el departamento de Putumayo.

Los guerrilleros de las Farc intimidaron a los conductores de cinco tractomulas que transitaban por la vía Mocoa – Pitalito, los hicieron descender de sus vehículos y procedieron a prenderle fuego a los mismos.

Esta nueva acción violenta de la guerrilla de las Farc se suma a las que tuvieron lugar durante la semana pasada, cuando en ese mismo departamento detuvieron varias caravanas de camiones que transportaban petróleo y los obligaron a verterlo sobre la vía.

Asimismo, derribaron torres de energía en los departamentos de Meta y Valle del Cauca, dejando a unas 400.000 personas sin energía eléctrica en Buenaventura.

Además, también volaron con explosivos varios tramos de la vía Panamericana y la tubería del acueducto de la región del Ariari.

Uno de los hechos que fue repudiado por miles de personas que salieron a marchar, fue la muerte de una menor de dos años en el municipio de Miranda, Cauca, cuando sobre su casa cayeron dos explosivos lanzados por guerrilleros de las Farc que iban dirigidos contra un grupo de militares.

Fuente: http://bit.ly/1y3eptt

Murió asesora de Gana en Santa Rosa

Hoy a las 11:00 a.m. en el cementerio de Santa Rosa de Osos será sepultada la asesora de Gana, Gloria Beatriz Balbín Londoño, de 41 años, atacada el pasado domingo cuando abría una oficina de la empresa en el barrio Camellón de esa población.

La mujer, quien recibió un balazo en el cuello, murió en la noche del miércoles en la Clínica León XIII de Medellín, debido a una complicación.

Desde ayer a las 7:00 p.m. es velada en la sala El Divino Rostro de la población.

Santiago Londoño, secretario de Gobierno de Antioquia, informó que a la empleada le hicieron una traqueotomía y contrajo una bacteria lo que le produjo la muerte.

Respecto a la investigación, el comandante de la Policía Antioquia, coronel Gustavo Chaparro, aseguró que va muy adelantada y ya se tiene identificado a uno de los dos sicarios que atentaron contra la empleada. Agregó que por este atentado siguen cerradas las oficinas de Gana en ese municipio del Norte.

Gana dijo que las nueve oficinas de Santa Rosa están cerradas pero en forma preventiva, mientras se investiga si la muerte de esta asesora tiene que ver con las amenazas que le vienen haciendo a la empresa en el norte, nordeste y el Bajo Cauca.

Anotó que en otros municipios como Yarumal, Tarazá, El Bagre y Caucasia se viene trabajando de la mano de la Policía para reanudar las actividades cotidianas.

El secretario de Gobierno de Antioquia aseveró en este sentido que ya con la asesoría de la Policía se están abriendo algunos puestos en municipios como Caucasia y Segovia.

El pasado 27 de marzo, en el municipio de Yarumal, pistoleros asesinaron a Diana Lucía Restrepo, otra empleada de Gana. Bandas criminales del Bajo Cauca, Nordeste y norte de Antioquia le exigen a Gana el pago de una millonaria vacuna, ante lo cual la empresa se ha negado, lo que originó una serie de amenazas a los asesores en diferentes municipios.

Fuente: http://bit.ly/RrCqvR

Fuerza pública reprime ciudadanos en vísperas del Paro Nacional

El 27 de abril se presentaron dos hechos de detención arbitraria en la región del centro oriente colombiano, departamentos de Casanare y Santander dejando como víctimas a varios dirigentes sociales. Estos se presentan como los primeros hechos de represión policial en el marco de la movilización nacional de los sectores agrarios y populares del país.

Aproximadamente a las 00:00 horas, cuando transitaban en bus por la vía Aguazul – Yopal, fueron detenidos irregularmente, en el puesto de control de la policía ubicado sobre el río Charte, los dirigentes campesinos Héctor Julio Martínez y Pedro José Murcia quienes fueron trasladados por parte de funcionarios del Seccional de Investigación Judicial -Sijin- al casco urbano de Aguazul e incomunicados por más de dos horas, para después ser llevados al lugar de su detención.

A su vez, en el municipio de Berlín Santander miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios -Esmad-  impidieron a un grupo de personas provenientes de la zona rural el ingreso, circulación y permanencia en el casco urbano, a pesar de que hasta el momento no se ha producido bloqueo ni obstaculización de espacio público. El Mayor de la Policía Oscar Caballero, comandante del distrito n° 9 de matanza del departamento de Santander, fotografió a las personas y además destruyó la cédula de ciudadanía del dirigente juvenil Kendy Ortiz, miembro de la junta nacional de la Asociación Nacional de Jóvenes y Estudiantes de Colombia -Anjeco-.

De igual forma, en el departamento de Boyacá la Policía está entregando a los ciudadanos panfletos en los cuales se deslegitima la jornada nacional de paro, según expresaron manifestantes presentes en la zona.

Para Sonia López de la Fundación de Derechos Humanos Joel Sierra, se trata de una campaña emprendida por diferentes instituciones del Estado que pretenden estigmatizar,  difamar y satanizar la movilización para justificar las agresiones. Agregó: “con estas campañas se desconocen las reclamaciones que desde el paro del año 2013 vienen realizando los campesinos y aun no tienen respuestas satisfactorias por parte del gobierno nacional”.

Fuente: http://bit.ly/1kiyMNt

Conalminercol reitera participación en paro nacional que iniciará el lunes

En Antioquia habrá tres puntos de concentración de los manifestantes.

La Confederación Nacional de Mineros, que agrupa a pequeños y medianos mineros artesanales reiteró su participación en el paro nacional que iniciará el lunes, por considerar que el Gobierno no le ha cumplido los acuerdos que suscribieron el año pasado para poner fin a la protesta que adelantaron durante casi 20 días.
 
Así lo reiteró Luz Estella Ramírez, directora ejecutiva de Conalminercol, quien indicó que todos los acercamientos con los delegados del gobierno han sido infructuosos, y continúan los señalamientos de criminales, la destrucción de maquinaría y la ocurrencia de hechos tan graves como los que se han registrado en Buriticá.
 

La señora Ramírez indicó que en Antioquia habrá tres puntos de concentración de los mineros, uno en Buriticá donde se está expresando con mayor algidez la confrontación entre multinacionales y pequeños mineros, otro Caucasia en el Bajo Cauca Antioqueño una de las principales regiones mineras, y el municipio de la Pintada en donde también se concentrarán los manifestantes de Dignidad Cafetera.
 
La directora ejecutiva de Conalminercol aseguró que se trata de una jornada civilista, democrática y amplia, sin actos de violencia, para exigirle al Gobierno Nacional que cumpla con lo que firmó. 

Fuente: http://bit.ly/1kizhqM

Miedo al paro minero

Los habitantes de Caucasia empezaron a hacer provisiones, pues se prevé que el comercio cerrará esta semana.
Los habitantes de Caucasia empezaron a hacer provisiones, pues se prevé que el comercio cerrará esta semana.
 

Caucasia, Antioquia. Ante la llegada de gremios mineros a este municipio, para las manifestaciones del paro nacional, la Alcaldía expidió un decreto que prohíbe el parrillero desde las 8:00 de la mañana hasta 5:00 de la tarde. Desde el sábado empezaron a llegar mineros del Bajo Cauca y otros municipios de Antioquia, para empezar las marchas que desde hoy se tomarán Caucasia.

Hoy a las 8:00 de la mañana será la primera marcha minera, en la que los manifestantes saldrán con todas sus familias para exigir el derecho al trabajo.

Los más preocupados por la situación son los comerciantes, pues con pérdidas que superaron los 5 mil millones de pesos, según ellos, este municipio del Bajo Cauca, fue más afectado por el paro minero en julio y agosto del año pasado.

Margarita Rodríguez, comerciante del municipio, dijo que todavía no acaban de reponerse de las perdidas del año pasado, por eso temen por las nuevas concentraciones. "Las manifestaciones nos afectan porque comienzan pacíficas y terminan en unos desórdenes terribles, destruyen carros, hay saqueos al comercio y demás", señaló la mujer.

"El miedo y la preocupación en el Bajo Cauca es que de nuevo las protestas afecten el orden público, tal como sucedió el año pasado", dijo Juan Diego Calle, comerciante.

El alcalde de Caucasia, José Nadín Arabia Abissad, dijo que la  comunidad debe estar  tranquila, porque la autoridad está preparada para enfrentar desórdenes.

Fuente: http://bit.ly/1kiDpqA

Tarazá despide a Reinaldo Ángel Posso Muñetón en un emotivo y multitudinario entierro

La Administración Municipal de Tarazá elogió su vocación de servicio al bien común y su entrega a los habitantes taraceños.

En medio del repudio y la consternación, los habitantes del municipio de Tarazá (Antioquia), despidieron este viernes 25 de abril de 2014, al excalde de esta localidad, Reinaldo Ángel Posso Muñetón, quien fue asesinado presuntamente el míercoles 23 de abril en la noche, junto a un contratista del municipio, Didier Sánchez, de 42 años.

 

 

Según fuentes extraoficiales, los cuerpos fueron hallados con múltiples heridas de balas, el jueves 24 de abril, en un paraje solitario de la zona rural de Cáceres, Bajo Cauca Antioqueño, con evidencias de haber sido ambos torturados. El viernes 25 de abril, el féretro llegó poco después de las dos de la tarde a la Parroquia Maria Auxiliadora de Tarazá y fue recibido por la práctica totalidad de los habitantes del municipio. Más de 1.500 personas formaron la comitiva fúnebre hasta el cementerio, donde oficiaron, el Monseñor, Gerardo Patiño y el párroco de la Iglesia Nuestra Señora de los Dolores, Ramón López.

En la homilía escrita por uno de los párrocos del municipio, se recordó los orígenes de Posso y se hizo alarde al reconocimiento del pueblo como el primer y único Alcalde de la democracia. El mandatario local, Héctor Leonidas Giraldo Arango, agradeció con dolor a Posso su labor política en favor de todos los habitantes del municipio, su amistad demostrada hacia muchos taraceños, el cariño y afecto hacia su pueblo y haber engrandecido el nombre de la localidad con acciones valerosas.

Tras recordar el lema de su programa de gobierno 2004 -2007, “Tarazá somos todos, la democracia es posible”, familiares, amigos y conocidos expresaron su deseo de que su memoria y sus buenas obras sirvan de ejemplo a todos los taraceños.

Todos sus amigos coincidieron en calificar su entierro como un acto multitudinario y sentido ya que toda la localidad se encontraba afligida, acongojada y apesadumbrada, por la muerte sorpresiva de un ser humano ejemplar.

Fuente: http://bit.ly/1kiAwWN

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