En la zona de Piamonte (Caucasia), la cual conocía metro a metro tras muchos años como paramilitar y ahora al mando de la banda criminal "los Rastrojos, Ángel de Jesús Pacheco Chanci, alias "Sebastián" se sentía seguro.
Pero la madrugada del pasado lunes, mientras tomaba licor con hombres bajo su mando, la conversación dejó de ser amigable y el cabecilla empezó a discutir con sus subalternos. Les manifestó su desconfianza. Al rato, sonaron seis disparos y "Sebastián" se desplomó herido de muerte.
Alias "Guadaña" y "el Negro" acababan de asesinar en medio de una discusión a "Sebastián", delincuente por quien el Gobierno ofrecía una recompensa de 1.200 millones de pesos. Los dos miembros encargados de la seguridad de su jefe temieron la reacción de la banda y solo atinaron a pedir ayuda a las autoridades.
"Le dispararon y está herido", fue la primera pista que tuvieron las autoridades de lo acontecido por parte de familiares de los dos implicados, quienes se comunicaron en la madrugada del lunes al número de emergencias 123, en Sincelejo, para pedir protección.
La Policía se comunicó a los celulares de "Guadaña" y "el Negro", quienes indicaron el predio donde se encontraban. "Dijeron que estaban reunidos y se suscitó una discusión porque su jefe (alias 'Sebastián') empezó a recriminarlos y en un momento empuñó un arma. Entonces ellos reaccionaron y le dispararon", relató un oficial que conoció la confesión de los presuntos homicidas.
La muerte de alias "Sebastián" es un descanso para los habitantes del Bajo Cauca antioqueño, "porque era el azote de esta zona y nos mantenía amedrentados", aseguró Leiderman Ortiz, un ciudadano de Caucasia a quien el cabecilla había declarado objetivo militar.
El resquebrajamiento
Más allá de que la muerte de alias "Sebastián" haya sido por una rencilla personal, las autoridades piensan que se trata del resquebrajamiento de "los Rastrojos" como consta en llamadas interceptadas por inteligencia donde se manifiesta que "ya se estaban dando purgas internas en esta organización criminal".
En una conversación grabada el 13 de agosto de 2010, dos de los hombres de confianza del jefe hablan de "aliarse para ganarse el puesto de Óscar Galvis, alias "Pantera" o "Javier", segundo al mando de esta bacrim capturado el 19 de junio de 2010 en una finca de la vereda Cuturú, pero dejado en libertad por el juez II promiscuo de Caucasia, Jairo de Jesús Mathiu Zuleta, quien argumentó fallas en el procedimiento de su detención. "Pantera" fue recapturado un año después.
En la conversación se escucha: "Viejo ya está lista la vuelta, hay que caerles tempranito y darles el regalito", "listo de una, pero ¿a que horas reclamo la piña (granada)? Váyase de una que los verdes (Policía) no están y la vía está libre", fue la conversación entre los dos integrantes de la cúpula de "los Rastrojos".
Dos días después, una granada fue lanzada a un local comercial de Caucasia por dos hombres que se movilizaban en moto y dejó dos personas lesionadas. En esa ocasión las autoridades atribuyeron el hecho a disputas entre bandas criminales.
"Sabemos que 'los Rastrojos' están en problemas. Más ahora que mataron a 'Sebastián'. Los que vienen detrás de él, como alias 'Santiago', alias 'Brandon', alias 'Daniel o 'el Diablo' y alias 'Jorge Cucho' buscarán subirse al puesto. Se viene un reacomodamiento en el que se puede presentar que aumenten los homicidios en la zona", informaron fuentes de inteligencia militar de la VII División del Ejército.
Al otro día del asesinato de "Sebastián", un hombre fue acribillado en la misma vereda. Los dos presuntos asesinos, alias "el Negro" y alias "Guadaña" se entregaron a las autoridades. Al día siguiente se sometieron a la justicia cuatro más de esta estructura. Dos se entregaron al CTI y dos a la Brigada 11 del Ejército.
Fuentes de inteligencia de la Policía explicaron que hace algún tiempo se venían presentando asesinatos de algunos mototaxistas, personas que fueron contratados por "los Rastrojos" y "los Urabeños" para que les sirvieran de campaneros o incluso para hacerse inteligencia entre las bandas criminales.
"Ellos cogieron algunos desmovilizados y les dieron una moto para trabajar, pero la condición era que les dieran parte del producido y se les informara de movimientos raros o personas extrañas en la región", aseguran investigadores de la Policía.
Aunque las autoridades dan como uno de los posibles sucesores a alias "Talibán", cabecilla que delinque en el Chocó, el comandante de la Policía Antioquia, José Gerardo Acevedo Ossa, señaló que "tenemos serios indicios de que el posible sucesor de 'Sebastián' es 'Brandon'".
Sin embargo, las mismas autoridades afirman tener un dispositivo para contrarrestar la violencia que pueda desatarse con la muerte de "Sebastián" y las ganas de poder de los jefes que están detrás del puesto del cabecilla asesinado.
El coronel Acevedo aseguró que "los Rastrojos han quedado sin una cabeza visible, pero sin embargo seguiremos en la ofensiva contra esta y las otras bandas criminales".
Una estructura muy golpeada
Pero la alianza entre "los Rastrojos" y "los Paisas" no es la primera vez que tiene diferencias dentro de la estructura.
En los enfrentamientos con "los Urabeños", "los Paisas" fueron tan debilitados que en ese momento "Sebastián" decidió aliarse con "los Rastrojos", incluso para disputarles el territorio y poder enfrentarse con la Fuerza Pública.
Su debilitamiento llegó al extremo de que "tuvieron que irse de casa en casa de desmovilizados ofreciéndoles sueldos de 600.000 pesos para que volvieran y retomarán las armas", precisaron investigadores judiciales.
Sumado a esto, los continuos golpes asestados por la Fuerza Pública los han dejado con alrededor de 150 hombres en armas en el Bajo Cauca antioqueño y unos 1.800 en el país. Su presencia está más marcada en los departamentos de Nariño, Norte de Santander, Valle del Cauca, Antioquia, Cauca, Cesar, Santander, Bolívar y Chocó.
En los operativos, la VII División del Ejército, les ha propinado duros golpes como la destrucción de un laboratorio con 1.786 kilos de cocaína, la incautación de 96 fusiles y 4 lanzagranadas, el abatimiento del cabecilla "Víctor Caparrapo" y 11 integrantes más en marzo de 2010, la captura de César Hernán Mejía Galindo, alias "Marlon".
Además, en mayo 19 de 2009, se sometieron a la justicia 180 integrantes de "los Rastrojos" y entregaron 145 fusiles, 2 morteros, 236 granadas y 414 proveedores.
El pasado viernes, en la vía entre Buenaventura y Cali (Valle del Cauca), les fueron incautados 47 fusiles de fabricación china. Las autoridades informaron que iban para López de Micay (Cauca).
"Esto lo que nos indica es que estamos peleando con estructuras que están muy armadas, con capacidad militar para destruir", afirmó un investigador del Ejército.
Sumado a esto, la operación Emperador ejecutada el 19 de mayo de 2011 por la Policía, dejó como capturados a 12 miembros de "los Rastrojos" entre los que se encontraban Rubén Darío Gil, alias "Vicente" y Carlos Vergara alias "Servi", señalados por el general Óscar Naranjo, director de la Policía Nacional, como el jefe de sicarios y el jefe de finanzas.
En la operación Emperador también fue capturado Carlos Mario Pacheco, alias "Pacheco", sobrino de "Sebastián" y su hijo, Ángel de Jesús Pacheco Sierra, alias "Virel", fue detenido en mayo pasado en una redada que la Policía Metropolitana realizó contra el combo de "la Camila" en Bello.
Asesinado en su territorio y por sus hombres terminó "Sebastián", quien fuera vendedor de comidas y luego mesero de bares en Caucasia. Luego se convirtió en un paramilitar que llegó a ser mando medio del bloque Central Bolívar de las extintas Auc, siempre tras la sombra de Carlos Mario Jiménez alias "Macaco".
Según las autoridades el mismo fin les espera a "los Rastrojos" que se debilitan por las guerras internas, la pelea a muerte por las rutas del narcotráfico y la minería ilegal con "los Urabeños", y la ofensiva lanzada por el Gobierno Nacional para desvertebrar las bandas criminales que delinquen en el país.
Fuente: http://bit.ly/rd0t6p