El 'Clan Úsuga' ahora quiere dedicarse a la minería ilegal

A mediados del año pasado, una familia campesina en el corregimiento El Doce, en Tarazá (Antioquia) recibió una oferta sin salida: 150 millones de pesos a cambio de su finca de 122 hectáreas en plena zona minera, o la muerte. Las amenazas venían de una banda de la región que decía ser vocera de Dairo Antonio Úsuga David, alias ‘Otoniel’, el máximo jefe de la banda criminal ‘los Urabeños’, ahora llamada ‘clan Úsuga’.

La denuncia de uno de los miembros de la familia, que optó por salir huyendo de sus tierras y no recibir un solo peso, puso a la Policía tras de una de las redes al servicio de ‘Otoniel’ y de una reciente modalidad de despojo de tierras con la minería.

La Policía de Carabineros, a través de la Unidad de Intervención especial contra la Minería Ilegal, acaba de capturar a siete miembros de esa red que venía sembrando zozobra en Tarazá. Otros tres, desmovilizados de las Auc y quienes para la Policía eran los jefes de la organización ilícita, fueron notificados en la cárcel de procesos por explotación ilícita de yacimientos, desplazamiento, concierto para delinquir, entre otros delitos.

En el expediente, que ayer fue expuesto por la Fiscalía ante un juez en Medellín, la Policía señala que los desmovilizados del ‘bloque Mineros’ de las Auc alias ‘Chaparro’, ‘Rojo’ y ‘Viejito’ seguían delinquiendo desde las cárceles. Los tres pertenecieron a la banda criminal ‘los Paisas’, pero a finales del 2012 crearon una alianza con ‘los Urabeños’ basada en explotación minera. “La alianza consistió en recibir apoyo de la banda criminal, en hombres y armas, a cambio de entregar el 60 por ciento de las ganancias de la explotación de los yacimientos”, dijo uno de los investigadores del caso.

Además, en la historia criminal de ‘Chaparro’, preso en la cárcel El Pedregal desde septiembre del 2013, aparece que este hombre hizo parte del anillo de seguridad de César Augusto Luján, el exjefe paramilitar conocido como ‘Mono Vides’ y quien cayó muerto en el 2010 en un enfrentamiento con la Fuerza Pública.

La Policía dice que en la finca de la familia campesina, los hombres de ‘Chaparro’ instalaron a miembros de la banda para la siembra de cultivos de mata de coca mientras preparaban las tierras para la exploración aurífera. En el momento de la operación, los peritos establecieron que cada mes producían ganancias entre los 70 y 90 millones de pesos producto de la minería ilegal.

Otro de los frentes de investigación de la Policía es el capítulo de los propietarios de las retroexcavadoras utilizadas.

En una de las denuncias aparece que varias de las máquinas usadas presuntamente en la minería ilegal pertenecerían al exalcalde de Tarazá Reinaldo Posso, quien a finales de abril fue asesinado por sicarios en la vereda Puerto Bélgica, en Tarazá. Sobre su muerte, las autoridades aún investigan los móviles del crimen.

No los enviaron a una cárcel

Un juez de control de garantías decidió no enviar a la cárcel a los siete capturados al considerar que por la calidad de los delitos podían seguir vinculados al proceso sin ir a un penal. Esto, según dijo, por el nivel de hacinamiento.

Fuente: http://bit.ly/1oFH6JY

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