El próximo sábado estarían decidiendo el inicio de un paro indefinido los cerca de 20.000 mineros que hay en los seis municipios del Bajo Cauca antioqueño, esto de no llegar a algún acuerdo en la reunión que este miércoles se hará en Caucasia, con la presencia de los alcaldes de esta subregión y el Gobernador de Antioquia, para escuchar y evaluar las problemáticas que afrontan los pequeños y medianos productores de oro de esta zona.
Estos mineros se unirían al paro minero que desde hace tres semanas realizan los mineros tradicionales y ancestrales de los municipios de Segovia y Remedios, en el nordeste del departamento, que ya ha dejado víctimas fatales y mantiene a los municipios con desabastecimiento de víveres.
"El problema es de comercialización, a los mineros nos cambiaron las reglas de juego y ya las comercializadoras de Medellín ni las internacionales nos reciben el oro", comentó Ramiro Restrepo, presidente de la Asociación de Mineros del Bajo Cauca (Asomineros B. C.), quien agregó que por esa situación los mineros han tenido que guardar su oro.
El líder sostiene que la minería representa aproximadamente el 80 por ciento de la economía de la subregión, el otro 20 por ciento se repartiría entre ganadería y producción agropecuaria.
De acuerdo con Restrepo, la incomodidad de los mineros con este "cambio de reglas" se habría intensificado el pasado mes de julio aunque viene sucediendo desde hace más tiempo.
El problema, dice, radica en que ahora a los mineros les exigen tener licencias y títulos ambientales para la extracción del mineral, en otras palabras, legalizar la extracción de oro, y contar documentos como el Runt y otros para comprarles el oro.
Además, dicen que el Gobierno Nacional ha incumplido acuerdos a los que habían llegado en paros anteriores y que los procesos de legalización de entables han sido un fracaso en la subregión.
Los procesos habrían empezado en firme en el 2012 y hasta la fecha, sostiene Restrepo, no se ha legalizado ni una sola unidad de producción de oro; en total habría cerca de 1.200 de estas unidades, pero muchas estarían frenadas por el problema de comercialización.
"Antes los barequeros iban y se certificaban en la Alcaldía como barequeros y ya podían vender su oro, pero ahora les exigen muchos papeles que no pueden conseguir. Si están todo el día sacando su oro para darle de comer a su familia, en qué momentos van a poder ir a sacar todos los papeles que les exigen?", comentó.
Al barequeo, que consiste en ir a fuentes hídricas con una batea y una pala para buscar el preciado mineral, se dedicaría la gran mayoría de los mineros en el Bajo Cauca, con unas 18.000 personas, dijo Restrepo. El resto de mineros estaría divido entre los que usan motobombas y finalmente los que tienen minidragas, que solo serían alrededor de 200 personas, aseguró el líder.
Fuente: http://bit.ly/2wtDLIe